viernes, 27 de enero de 2017

sylvia, siempre





La señorita Drake se dispone a cenar.

Como ya es ducha
en esos elaborados rituales
que atenúan la malicia 
de la mesa nudosa y la silla curva,
la recién llegada
viste de púrpura, anda con cuidado
entre sus secretas combinaciones de cáscaras de huevo
y frágiles colibríes,
camina de puntillas, pálida como un ratón,
entre las rosas damascenas 
que, poco a poco, van abriendo sus pétalos velludos
para devorarla y arrastrarla al interior
del diseño de la alfombra.

Con su vivaz mirada de pájaro alzada de reojo
puede ver en la mella del tiempo
las peligrosas espinas que brotan en las tablillas del parqué
y desbaratar su zarzaleño plan;
cruzando el aire lleno de emboscadas,
cegador a causa de los deslumbrantes pedazos
de cristales rotos,
avanza despacio, con aliento cauto,
sorteando puntas y colmillos,
hasta que poniéndose de costado,
levanta un pie palmeado tras otro
en el ambiente calmoso, sofocante,
del comedor de los pacientes.

Sylvia Plath



Imagen: Water Flowers. Alfombra de Joseph Carini inspirada en los trabajos de Yuki Hayama. 


domingo, 22 de enero de 2017

ópera suicida, Werther

Las posibilidades dramáticas del suicidio han sido recogidas por la literatura de todos los tiempos. La música, en especial la ópera tampoco ha sido inmune a él.

Jules Massenett (18842-1912), compone Werther en 1892 a partir de la gran novela escrita por  Goethe (1749-1832). Esta novela, una de las primeras en género epistolar, publicada en una primera versión anónima en 1774 y en una segunda en 1787, significó un gran acontecimiento y una revolución del genero novelesco moderno, ejerciendo una gran influencia en la literatura y en las artes en general, de las que la música detenta un lugar especial. 

Siendo importante su influencia en el arte, la novela supuso sobretodo un revulsivo en el seno de la sociedad culta y de una manera especial en círculos de la juventud burguesa del momento. Jóvenes ociosos aceptaron la figura, formas y estilo del protagonista, que se dice desató entre ellos una ola de suicidios, por lo que fue perseguida y prohibida en varios países europeos.

Cuando Massenet compuso esta bella ópera, muchos otros músicos y dramaturgos ya se habían inspirado en ella, algunos dando un giro radical a la historia, pero él, respetó la generalidad de la obra, concentrando algunos episodios, y obviando otros, pero manteniendo el desenlace fatal.

https://www.youtube.com/watch?v=PzKhikZ4oVEE

https://www.liceubarcelona.cat/es/temporada-2016-2017/opera/werther

Imagen: Suicidio de Werther, grabado sobre madera.


domingo, 15 de enero de 2017

Christo en lugar de Trump


Luis Camnitzer (1937) artista uruguayo afincado en Nueva York desde 1964 solicita firmas de simpatizantes desde una plataforma online, para llevar a cabo un proyecto que transformaría la iniciativa racista de Trump de construir un muro entre Mexico y Estados Unidos, en un evento artístico público, y ayudaría a mejorar la imagen de EE UU con un "revestimiento cultural". Con esta iniciativa se insta al futuro presidente Donald Trump a que sustituya la idea del muro divisorio en la frontera entre los dos países, por una nueva versión, en color naranja, de la obra Running Fence (1972-76), del artista Christo.


Christo, artista conocido por sus grandes intervenciones en la naturaleza, colocó, junto con Jeanne-Claude (fallecida en 2009), una barrera de tela blanca de 39,4 kilómetros de longitud, y 5,5 metros de altura, en zonas rurales de Sonoma y el Condado de Marin, cerca de San Francisco, en California, en 1976.


https://www.change.org/p/donald-trump-commission-christo-with-an-orange-running-fence-that-separates-the-u-s-from-mexico



domingo, 8 de enero de 2017

la vida continua, feliz año, feliz todo!

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55. A veces sueño con un montón de basura, hay cáscaras de huevo aplastadas y una jauría de alimañas escarbando entre las pieles de naranja podridas, los restos de café y las hojas amarillentas y descompuestas de lechuga. Es el sueño hecho de fragmentos de pesadillas, cuando al día siguiente aguarda una operación o un examen. Otras veces el sueño es deprimente, gris, pero su quietud alivia: ese es el sueño cuando trabajas, cuando cada día es como el otro y el siguiente, y el único tiempo es el presente. Pero hay sueños que nacen de la primavera y del letargo invernal de los osos en sus cuevas silenciosas. Mis oídos captan entonces el trinar claro de los pájaros al amanecer y siento la luz del sol en los párpados cerrados, el olor de la tierra en la nariz, el viento cálido en la piel. Tengo los ojos cerrados, todavía no he vuelto a mi cuerpo, pero ya soy parte de algo, del aire, de la tierra, del fuego del agua. Y mientras oigo el ruido de los coches en la calle y la respiración de alguien en la habitación contigua, abro los ojos, obligo a mi cuerpo a regresar y, apoyándome en un codo, miro a través de la ventana abierta, veo las cortinas ondeando al viento del domingo, la luz del sol y las sombras intensas, nítidas en el edificio de enfrente. Seguir echada y lamentar haber salido del utero cuando se corta el cordón umbilical y se ata el nudo. Lamentarlo, lamentarlo, y saber que el próximo movimiento será incorporarse, ir hasta el baño poniendo un pie delante del otro, sentarse, aún medio dormida, en la taza, soltar el chorro de orina amarillo y brillante mientras bostezo y desenredo con los dedos mi pelo rizado. Levantarse, cepillarse los dientes, lavarse la cara y, bajo la despiadada luz diurna, reanudar todos los rituales del atavío que establece nuestra cultura...

Silvia Plath. Diarios completos. Alba Editorial. Noviembre 2016

Imagen: obra de Phoebe Unwin