viernes, 26 de junio de 2009

Puerta


Puerta, psicoanalíticamente símbolo femenino que, de otro lado, implica todo el significado del agujero, de lo que permite el paso y es, consecuentemente, contrario al muro. Entre la puerta del templo y el altar hay la misma relación que entre la circunferencia y el centro; aun siendo los dos elementos más alejados, son en cierta manera los más próximos, ya que se determinan mutuamente y se reflejan. Esto se advierte en la decoración arquitectónica de las catedrales, en las que con la mayor frecuencia la portada es tratada como retablo del altar.


Texto: Diccionario de símbolos. Juan Eduardo Cirlot



Fotografía: Puerta de dos hojas, India siglo XVIII. La combinación de madera y nácar así como la forma y el diseño de esta bella puerta de dos hojas indica que es obra de artesanos locales de Guyarat, región célebre en el siglo XVI como centro de la producción del nácar. Es éste un diseño a partir de mosaicos creados con fragmentos de nácar perforado. Es posible que esta puerta decorara una residencia acomodada o un edificio público, tal vez un templo o una tumba. La cadena que cuelga del extremo superior de la hoja derecha sugiere que la puerta debió de encontrarse en un espacio interior, sujeta a un gancho dentro del marco de la puerta para mantenerla cerrada; en cambio, de tratarse de una puerta exterior hubiera requerido un cerrojo más resistente para garantizar la seguridad.
Texto: Catálogo de la Exposición de Los mundos del Islam
PD:Pinchar la foto para ver el detalle

8 comentarios:

Josefina dijo...

Las puertas se abren y se cierran

• “No me olvides” es una flor, símbolo del amor desesperado.

Según una vieja leyenda islámica, un ángel se encontraba llorando a las puertas del Paraíso, del que Alá le había expulsado porque el ángel se había enamorado y amaba a una mujer mortal. Sólo sería perdonada si plantaba la flor nomeolvides por todo el mundo. Cuando el ángel contó a su enamorada este requisito, tan difícil de cumplir, ella prometió ayudarlo en su tarea. Tanto amor y sacrificio conmovieron a Alá, que otorgó la inmortalidad a la mujer y abrió las puertas del Paraíso a los amantes.

pfp dijo...

¡un muro sin puerta dios mío¡

¡abre la muralla, cierra la muralla¡ ¿que hariamos sin puertas¿...

que bonito... toc toc... ¿se puede?

¡adelante¡

¡no¡ espere, por favor...


¿será la puerta el origen de la cortesía, de los modos, de las maneras?

hay puertas cerradas pero que se abren a la llamada, y las hay que permanecen abiertas invariablemente, aunque estas me producen algo de inquietud...

me gusta poder llamar a las puertas, y más me gusta todavía saber que hay alguien al otro lado, aunque no me espere, aunque no me conozca, aunque no simpatice...

...se abren se cierran... gran invento, "la puerta"...

Barbebleue dijo...

Adoro la madreperla, más sobre un símbolo femenino, y si éste da entrada al Paraíso, resulta apasionante.
¡Hermoso templo, bienvenida tumba!

Dios mío, Pilar, no olvides hablar con el Aga Khan IV !

pfp dijo...

pan comido Barbazul...

Joaquim dijo...

Puerta! expresión tremenda cuando se espulsa a alguien o este la toma para dejarnos.

pfp dijo...

tienes razón Joaquim, que fuerte¡¡¡ni yo a tí ni tú a mí jamais de la vie¡

aquí toc, toc, y todos para adentro.

besos

Anónimo dijo...

La puerta es bellísima. El texto es interesante y vuestros comentarios me han divertido mucho. No habéis hablado de puertas invisibles y, sin embargo, del todo infranqueables. Las hay y duelen.
Un beso abierto.
Glòria

Anónimo dijo...
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