viernes, 14 de noviembre de 2008

una mujer con caracter, Nancy Spero




Nancy Spero (Cleveland, Ohio, 1926) es ahora una mujer de 82 años , menuda, delgadita , con el pelo muy corto, víctima de una artrosis reumatoide degenerativa que le diagnosticaron a los treintaitantos y que le ha limitado física y moralmente por las fuertes crisis de dolor padecidas.

Su trayectoria artística tiene dos polos críticos, uno hacia las políticas del mundo del arte y otro fundamental y principal, el feminismo, concretamente la denuncia de la violencia la tortura y la injusticia contra las mujeres.

Su visión es transcultural, atemporal y claramente revolucionaria. Habla no solamente de la fatalidad de la violencia masculina sobre la mujer sino de todas las víctimas y testigos del poder que sustenta la tiranía. Hay mucha rabia en su obra mucha desesperación...
Vivió en París con su marido León Golub (pintor también) y los tres hijos de ambos entre 1959 y 1964, y fue al regresar a Nueva York cuando forjó un estilo propio, con un enfoque iconoclasta de los materiales, los procesos y el espacio, como reacción al Expresionismo Abstracto, al Pop-Art y al Minimalismo en boga en aquel momento, en los todopoderosos círculos artísticos de Nueva York, un medio eminentemente masculino.

Ejerció en los sesenta y setenta como pionera del arte feminista y de militancia política. Comprometida con colectivos antirracistas y pacifistas (más allá del gran conflicto de Vietnam). Aparte de esta voluntad política su obra tiene también una dimensión arcana en la que los mitos y misterios ancestrales se interrelacionan con el discurso social.
Su sello de madurez lo desarrolla en su serie de "papiros" inspirados en el "Libro de los Muertos" (1550 años antes de Cristo), cuyo código de "conducta ejemplar" está dirigido a aquellos que buscan un lugar en el firmamento.

El texto es esencial también en todos sus trabajos, Nancy Spero, emplea fragmentos de textos del escritor francés Artaud, (agresividad, locura, dolor)... su lectura puede hacerse casi en cualquier sentido de su obra, mayormente ejecutada en soporte papel, un soporte frágil, delicado pero explícito y contundente como ella misma.





Actualmente se expone su obra en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en Madrid hasta el 5 de enero de 2009




Fotografía: obra de Nancy Spero


5 comentarios:

Anónimo dijo...

La artritis reumatoide sigue siendo una penosa enfermedad que va deformando las articulaciones de todo el cuerpo, incluida la columna vertebral y que hoy día tiene un mejor tratamiento gracias a la cirugía, sobretodo de recambio (prótesis) y a la farmacopea, muy cercana a la "quimioterapia de los tumores".
Pero no afecta para nada la cabeza (excepto la mala leche que suelen tener los pacientes a causa de sus dolores y su progresiva incapacidad funcional) y por ello son capaces de crear obras tan interesantes y bellas como la que ilustra la página. Karajan era un reumatoideo y Kurt Masur, a quien tuve la suerte de ver muy recientemente dirigir una 6ª de Beethoven, es otro paciente o "padeciente" de esta desagradable enfermedad.

glòria dijo...

¿De dónde sacas estos seres maravillosos de vidas tan interesantes, de obras tan origin ales?
He pronunciado tres veces Nancy Spero y es ya un nombre casi familiar.
Gracias, Pilar. La ilustración muy imaginativa.
Petons!!!

pfp dijo...

Gloria, ¿te suena aquello de Dios los cria y ellos se juntan?...

Me alegro que os haya gustado, la obra es interesante y su lucha más...

Kundry, ¿para cuando una cirugía de recambio tipo Robocop?, osea que solo te dejen la cabeza... cuando te enteres avisa sin falta

Anónimo dijo...

Muy interesante la vida de la artista y muy triste su enfermedad. Kundry ha descrito muy bien la asociación entre el padecimiento y la belleza que se puede crear, quien sepa transformarlo, quien pueda, quien esté dotado para ello...

Barbebleue dijo...

Creo que ese sufrimiento genera energía y militancia para obra y vida. Espero lo mejor de Spero, con lo visto y leído, ya asombra.

Lo único "bueno" de los pacientes con AR es que hace años se trataban con ORO, lo cual tiene su punto. Una curiosa mezcla de lujo y decadencia...